Cómo desarrollar hábitos saludables en los niños

Los hábitos de alimentación que sus hijos obtienen cuando son chicos normalmente son sus hábitos alimenticios durante toda su vida. Por eso es importante enseñarles desde pequeños a comer variado, comida saludable con diferentes texturas y sabores. Deben distinguir los sabores de diferentes frutas y vegetales y acostumbrarse a ellos para poder integrar esos ingredientes en su dieta diaria y en el futuro.

Últimamente la cantidad de niños con sobrepeso ha incrementado bastante. En la última Encuesta de Salud y Nutrición Nacional 2016 en México, tres de cada 10 niños se reportaron con sobrepeso u obesos. Los padres deben analizar qué tipo de alimentos están comiendo en casa y deben estar dispuestos a cambiar algunos hábitos, de ser necesario, para promover una dieta y hábitos adecuados para los pequeños.

El ajetreado estilo de vida que tenemos a veces nos alienta a comer comidas instantáneas, con altos niveles de azúcar, grasa saturada y grasas trans, colesterol y sodio, comparado con lo que podemos preparar en casa. El consumo frecuente de comida chatarra contiene muchas calorías, grasas malas y sodio.

Nunca es demasiado tarde para hacer cambios en casa, comenzando con los hábitos de los padres. La mejor educación para los niños es un ejemplo diario y constante de los padres. No significa que no haya lugar para antojos en la familia, pero la vida diaria es lo que hará una diferencia en el futuro de la salud de los niños. Estas recomendaciones podrían ayudar:

• Incluyan a los niños en la toma de decisiones de los hábitos alimenticios que se tendrán en casa.
• Si pueden, pidan ayuda a un profesional para conocer los requerimientos nutricionales de sus niños. Tengan en cuenta lo que les gusta y nunca los obliguen a comer algo.
• Vayan a comprar comida con los niños. De esa forma, cuando crezcan, serán capaces de comprar comida saludable.
• Tanto como sea posible, involucren a los niños en la preparación de almuerzos para que entiendan por qué eligieron esos alimentos para ellos.
• Reduzcan el consumo de grasas saturadas y sal al preparar la comida y díganles por qué.
• Limite el uso de carbohidratos simples como el azúcar, dulces, mermelada, etc. y expliquen cómo el comer ese tipo de comida puede llevar a una mala salud.
• Reemplace postres decadentes con gelatina y fruta fresca. Si los niños se acostumbran a este cambio desde pequeños será más fácil para ellos el seguirlo.
• Cambie aderezos empaquetados con aderezos hechos en casa con aceite de canola, yogurt y/o leche agria.
• Evite los refrescos, néctares y agua endulzada. Motive a los niños a beber agua simple para hidratarse y reducir el consumo de azúcares simples.
• Deje que los niños los vean cocinar. Explique las razones de por qué deberían comer comida saludable y cambie su menú para que no se aburran. Enséñeles a los niños la importancia de desayunar diario. Levántense un poco más temprano para preparárselo a los niños para que entrenen a su estómago para recibir alimento en la mañana.
• Use aceites vegetales como el de canola en vez de mantequilla o manteca para reducir la cantidad de grasa saturada que comen sus niños. Puede revisar la tabla de CanolaInfo para reemplazar grasas sólidas con aceite de canola y cocinar más saludable para su familia: http://bit.ly/2wX0dME.
  

La comida en la lonchera es una parte esencial de la dieta de los niños ya que puede ayudarles a acostumbrarse a comer un bocadillo entre el desayuno y la comida de la tarde. Este bocadillo puede ser fruta de temporada, vegetales con diferentes texturas, galletas integrales, granola, diferentes tipos de emparedados, yogurt, nueces o garbanzos con chile. De vez en cuando incluya un pequeño trozo de pastel, de preferencia hecho con aceite de canola.

Enseñarles a sus hijos sobre nutrición siempre es tiempo bien invertido. Los hábitos saludables que aprenden durante la infancia serán, en la mayoría de los casos, patrones de comportamiento durante toda su vida.

Debby Braun es Ingeniero en Alimentos. Es consultora de alimentación, nutrición, deporte, higiene y bienestar. Fue responsable por 15 años del servicio de alimentos del Comité Olímpico Mexicano. Durante 20 años ha impartido cursos en universidades como UAM, UNAM e IBERO. Es autora del libro Higiene en la Cocina.